No bajes la guardia por Alan Hernández



Alan Hernández, estará ministrando en Redes Juveniles 2008, del 24-26 de Marzo, 2008 en Monterrey, N.L México.


Es muy importante entender la posición que tenemos en Cristo como personas, como individuos.
Recuerdo hace algunos años en la iglesia donde tuve la oportunidad de crecer, mi pastor en aquel entonces cantaba una canción que él mismo compuso y que la recuerdo con mucho entusiasmo, decía: “Triunfo en triunfo el me lleva, me enseña como caminar con el (se repetía y el coro decía) Soy la cabeza y no la cola, estoy arriba y no abajo, yo he ganado, no he perdido porque yo soy más que vencedor”
recuerdo que nos gozábamos con esas canciones. El gozo que tenemos es el resultado de la victoria del Señor Jesucristo sobre la muerte, en Apocalipsis 1:5-6. dice: “…El nos lavó de nuestros pecados con su sangre, y nos hizo reyes y sacerdotes para Dios…..” Nos ha dado una posición privilegiada, estamos aquí para llevar su victoria como estandarte en nuestras vidas, donde todo mundo pueda ver lo que ha sucedido y como él nos ha cambiado.

Pero que triste es cuando nos anclamos en victorias que hemos tenido y no avanzamos, las victorias pasadas nos ayudan a afirmarnos y tener confianza en los pasos y proyectos que Dios nos dirija. Así como el rey David en su juventud tomó la experiencia que había tenido con el oso y el león los cuales mató en protección de sus ovejas y así después poder enfrentar al gigante que estaba atemorizando al ejercito de Israel, pero nunca debemos creer que porque ya hemos triunfado en ciertas áreas podemos descuidar otras o que podemos bajar la guardia o que vamos a tener una garantía de victoria, “No hay garantía” por eso el apóstol Pablo decía: “…Una cosa hago: olvidando ciertamente lo que queda atrás, y extendiéndome a lo que esta delante, prosigo a la meta……”Filip. 3:13-14
Esta es una actitud pro-activa, aunque el apóstol Pablo era un hombre de victoria, no se anclaba ni decía: “Como yo ya plante iglesias, como yo ya lleve a mucha gente a Cristo, entonces me voy a tomar unas vacaciones espirituales”, la cosa es que mientras estemos aquí en la tierra no tenemos vacaciones, recuerdo las palabras de un pastor en Argentina, una vez llegamos a su iglesia para trabajar y veníamos de una gira bastante pesada y uno del equipo comentó al pastor la posibilidad de un día de descanso y el nos dijo: “¡A descansar al cielo, aquí a trabajar!” tenia razón, en ese momento estábamos ahí para trabajar.

Regresando al rey David lo vemos en otra ocasión con otra actitud muy diferente a cuando se enfrentó al gigante en 2º Samuel 11:1-2 dice: “Aconteció al año siguiente, en el tiempo que salen los reyes a la guerra, que David envió a Joab, y con el a sus siervos y a todo Israel………pero David se quedo en Jerusalén” ERROR, ERROR, ¿Cómo se quedó en su casa cuando era tiempo de salir a la guerra? Estaba anclado en victorias pasadas. Todos sabemos que de aquí nace el adulterio con Betsabé y el asesinato de Urías su esposo, y todo por bajar su guardia, pero fíjate como empieza el Vs.2 de 2º Samuel 11: “Y sucedió un día, al caer la tarde, que se levanto David de su lecho y se paseaba por el terrado………” ¡Que actitud!, estarse levantando en la tarde de su cama.
Pues con razón paso lo que paso si andaba de ocioso, obviamente se confió en sus victorias anteriores y eso resultó en aquello que marcó su vida y su reinado, aunque Dios lo perdono, sus acciones tuvieron una consecuencia muy lamentable.
El apóstol Pablo le escribe a Timoteo su hijo en la fe: “Ten cuidado de ti mismo” Lo mismo te recuerdo, no bajes tu guardia, victorias pasadas no garantizan victorias futuras, nos dan confianza, para nuevos pasos que tomemos, pero tenemos que seguir con los ojos bien abiertos, tener cuidado de nosotros mismos y depender de Dios en todas las cosas.